Nuestras mascotas son capaces de desarrollar comportamientos similares a la depresión si alguna vez se sienten solos, culpables o descuidados.
Enfrentarnos a la pérdida de una mascota es uno de los momentos más difíciles que podemos tener en la vida. Nadie está preparado, es doloroso y no es fácil de superar. Para los niños pequeños, la muerte de una mascota suele ser su primera experiencia con la muerte; y para los adultos mayores, puede significar la pérdida del amor incondicional que una mascota ofrece en esa etapa de su vida. Pero al igual que un ser humano, nuestras mascotas también experimentan cambios en su estado de ánimo, en su comportamiento, y pueden pasar por periodos de duelo cuando un familiar o una mascota fallece.
¿Qué signos podrían indicar que nuestra mascota está deprimida?
Nuestras mascotas no tienen las mismas capacidades de razonamiento que nosotros. No pueden comunicar lo que sienten, por lo que es difícil determinar por qué se comportan de cierta manera en determinadas situaciones. Sin embargo, un estudio reciente de National Geographic encontró que los animales tienen el mismo funcionamiento básico cerebral para las emociones que los humano. ¡Impresionante! Esto significa que son capaces de desarrollar comportamientos similares a la depresión si alguna vez se sienten solos, culpables o descuidados.
En el estudio, se pudieron observar ciertos aspectos de la depresión que pueden medirse en animales. Uno de los síntomas principales de la depresión es la anhedonia, que es la pérdida del interés en realizar actividades placenteras. La depresión se midió por el interés en la comida, la motivación en actividades sexuales, interacciones sociales con amigos animales y observando los patrones o ciclos de sueño del animal.
Depresión en mascotas
El problema con las mascotas es que muchos cambios en el comportamiento sintomático de la depresión, como la falta de apetito, renuencia a hacer ejercicio, dormir más de lo habitual, o comportamiento agresivo, también pueden ser síntomas de problemas médicos.
Por eso, si el comportamiento de tu mascota cambia, te recomendamos ampliamente que lo primero que hagas, es llevar a tu mascota al veterinario.
Los veterinarios recomiendan que las mascotas que presentan síntomas de depresión reciban atención adicional, estímulos físicos y mentales, así como jugar con ellos y realizar actividades físicas como caminar con regularidad. Esto puede ayudar a tu mascota a recuperarse del estrés.
A menudo, prescriben antidepresivos a perros y gatos que muestran signos de depresión para tratar trastornos de conducta. El tratamiento parece ayudar, pero se requieren de más estudios a gran escala para estar seguros.
Conclusión
Nuestras mascotas son una fuente importante de felicidad y alegría para nosotros, por lo que es importante que les devolvamos el favor, dándoles un poco de atención extra. Especialmente si creemos que la causa de depresión se deba a los periodos de soledad que la mascota tiene durante todo el día mientras nosotros trabajamos.
Fuentes: